DIÓCESIS DE CHULUCANAS CELEBRÓ ENCUENTRO PASTORAL

Encuentro Pastoral reunió a 200 agentes pastorales

Para contemplar y celebrar con espíritu de gratitud la acción del Espíritu Santo en nuestro pueblo y reafirmar el compromiso de poner nuestros dones y talentos al servicio de la Iglesia Comunión se realizó desde el 15 al 17 de Diciembre el Encuentro Pastoral de Evaluación por comisiones diocesanas.

Durante el evento pastoral que reunió a equipos parroquiales de las 20 parroquias de las provincias de Ayabaca, Huancabamba y Morropón en el Centro Pastoral “La Sagrada Familia” se realizo la evaluación para visualizar las luces y sombras en el trabajo como comisiones diocesanas de todas las áreas pastorales, de acuerdo a su programación anual.

Obispo preocupado por atentados contra la vida

En palabras de Monseñor Daniel Turley Murphy, Obispo de la Diócesis de Chulucanas se mostró muy contento por la reunión con los agentes de pastoral y a la vez expresó la preocupación por lo que viene sucediendo en Huancabamba, en la comunidad de Segunda y Cajas. "Como pastor de esta Iglesia particular considera que la militarización de la zona no es oportuna pues sería una provocación y crearia mayor inestabilidad de la que ya existe, además menciono, que no es posible estar tranquilos mirando que las instituciones del estado en vez de garantizar derechos de todos, están matando a los campesinos. Esto significa un grave atentado contra la vida humana y por su convicción cristiana a ejemplo de nuestro salvador no puede quedarse en silencio.

Para transformar el mundo hay que vivir la comunión y ello significa que somos un solo cuerpo Diocesano y cuando una parte del cuerpo sufre no es coherente que la otra parte se conforme con lo que tiene, deberia actuar con prudencia levantando su voz para construir la paz sobre la base del dialogo con mucho respeto a la diginidad humana.".

Invocó a los agentes pastorales a sensibilizar a todas las familias del ámbito Diocesano y sentirse parte de este problema, además saber que estamos unidos para defender el agua, la vida y el ambiente como nuestra casa común en Ayabaca, Huancabamba y Morropón donde viven más de 80 mil familias.

Equipo Diocesano de Justicia y Paz